martes, 14 de diciembre de 2010

Una angustiante reflexión

Me harté

Me harté, sé que seré criticado. Conozco muchos pasajes en la Biblia que prometen dar fuerzas al que no tiene ninguna. Sé que la Biblia dice que él puede aumentar mis fuerzas como las del búfalo. También sé que Jesús puede aliviar mi cansancio.

También sé que algunos me criticarán y dirán ¡qué negativo! Sin embargo, no puedo disimular: me encuentro exhausto.

Aclaro, no estoy hartado de Dios ni mucho menos, tampoco del evangelio ¡Es un privilegio servir a Dios! Cada día pongo todo el corazón en lo que respecta a Dios; amo a Dios por sobre todo, amo a mi familia, a mi novia y a mis amigos. He recibido tanto de Dios. Mi agotamiento y frustración tienen otras razones.

¿Agobiado de qué?

He estado en conflicto desde hace un tiempo, creo sinceramente que el Señor me ha estado guiando a través de su maravilloso Espíritu. He estado incómodo por diferentes circunstancias que me han hecho reflexionar duramente en pos de la Palabra.

Durante meses que no veía el canal “cristiano” Enlace TBN, pero el Santo Espíritu me ha movido a observarlo, y comencé a verlo hace algunos días y me afligió aún más de lo que estaba. Me dispuse a oír “los mensajes” de aquellos que se enriquecen con el evangelio.

Ya no aguanto más que se tomen textos fuera del contexto para apoyar su avaricia, y vender sus revelaciones al mejor postor. Destruye mi ser interior, porque sé que nos están tomando el pelo.

Me cansé de oír programas de radio donde los pastores no predican el verdadero evangelio, sólo saben pedir dinero, dinero y más dinero.

¡No saben otro tema!; cansado estoy de la llamada T.V. “Cristiana”, que vende los milagros por siembras de 70 dólares al mes. “Pacte”, “Pacte”, “Pacte” con Dios, dé una siembra y pida su casa, pida su auto a cambio, dicen. ¡Qué vergüenza!

Eso me hace inevitablemente volver a recordar el oscurantismo de la edad media: “por cada moneda o billete que deposite en el arca, usted recibirá las bendiciones de Dios”, dicen los modernos motivadores.

Estoy cansado de escuchar: “Siembre una semilla en mi ministerio” ¡Uf, uf y recontra uf! Estoy cansado de “cubrirle las espaldas” a todos esos delincuentes y ladrones metidos en la iglesia ¡Ya no puedo soportarlo más!

Hastiado estoy de conciertos “para la gloria de Dios”, y ¿qué de las brujerías metidas en la iglesia?: “Invoco la prosperidad en tu vida”, “Decreto una vida de éxito para ti”, “Desato las riquezas para ti”

Me cansé de estar explicando la diferencia entre la verdadera fe bíblica y las creencias populares supersticiosas que enseñan los falsos “Apóstoles y Profetas” modernos.

¡Hay atar al diablo todos los domingos porque se suelta el lunes!

No aguanté más los cultos para “atar demonios” o para “quebrar las maldiciones que están sobre Chile y sobre el mundo”, que no tienen efectividad alguna, pues no tienen base bíblica. Seguramente “atan” a Satanás con una cadena tan larga que llega hasta la luna, porque anda tan suelto como siempre, y los hermanos atando y atando. Estoy exhausto. Ya se les acabaron los nudos, cada reunión lo atan ¿Y queda suelto durante la semana?, porque me di cuenta que los domingos hay que volverlo a atar.

Me cansa la aburrida repetición de las predicaciones sin base bíblica. Estoy cansado de oír “No juzguéis, para que no seáis juzgados”, estoy cansado de que los predicadores les pongan bozal a las ovejas y que les digan “No toquéis al Ungido de Jehová”, en lugar de decir como Pablo, “Todo lo que oísteis y visteis y aprendisteis de mí ESTO HACED, y Dios estará con vosotros”.

El crucero de la bendición

Me cansan los “súper ungidos” que te hacen viajar a donde viven para imponerte las manos en la cabeza y “traspasarte la unción y la visión”. Nada de Biblia. Todo es invento de hombres.

¡Qué doloroso es observarlos sin la verdadera unción del Espíritu Santo! Buscan crear ambientes espirituales con gritos y manifestaciones emocionales usando la psicología. No hay nada más desolador que un culto carismático con excelente sonido y luces multicolores, humo que pretende ser la “Nube de la gloria de Dios”, pero sin vitalidad espiritual, el ruido, los gritos y el desorden, las luces y el humo no son espiritualidad.

Me cansé de los chistes trillados sobre Pedro y muchos otros. ¡Cuántos “Comediantes cuentachistes”! Estoy tan abrumado, pero más que eso, es tristeza.

Y del último grito de la moda evangélica, Viajar en un “crucero” por el Caribe acompañado de los cantantes cristianos más famosos, y que han ganado Grammys, y con los mejores MOTIVADORES que te rascarán el oído con sus chistes y grandes revelaciones sobre el éxito y la prosperidad.

Me cansé de ver “evangelistas” que tiran el saco a las multitudes para recibir “la unción de Dios”. Me dejan abrumado al verlos “caer bajo el poder el Dios” para ser filmados en video y después decir: ¡Avivamiento!

¿Avivamiento o Agitamiento? o ¿Aviva…Miento?

Me entristecen las preguntas que me hacen sobre la “vida cristiana”. Personas que preguntan si pueden ir a fiestas del mundo, hacerse tatuajes, bailar en fiestas, recibir tratamiento con acupuntura, practicar karate y hasta yoga. La lista es enorme y parece inacabable.

Me cansa ese “cristianismo” mediocre tercermundista, carnal y ciego.

Me cansan los libros de escritores norteamericanos evangélicos traducidos al español. Ya no aguanto más libros de veintiún pasos para un liderazgo exitoso, ¿súper cristianos en 40 días?, todos estos Best Sellers sólo han venido a mostrar la verdadera condición de la iglesia: Miseria espiritual, IGNORANCIA DE DIOS Y SU PALABRA Y ANOREXIA ESPIRITUAL.

No logro entender cómo una iglesia necesita copiar los ejemplos de iglesias de EE.UU. Me cansé de tener que opinar si estoy de acuerdo o no con el nuevo modelo de “Mega crecimiento” copiado de la mercadotecnia secular y que está siendo adoptado POR TODO EL MUNDO ENTERO.

Me desespera tener que explicar que no todos los pastores son fraudulentos y mentirosos, aduladores y de doble moral. No existe nada más extenuante, desgastante y agotador tener que demostrar, a familiares y amigos cristianos y no cristianos, que aquél último escándalo de la farándula cristiana es una excepción. “No todos somos iguales”, ya me cansé de repetirlo.

Apostolitis aguda

Me cansé de los hambrientos de poder, de reconocimiento y de poder político, el liderazgo está enfermo de apostolitis aguda y empeorando.

Me cansé de los que presumen ser “Doctores” en teología con su título que consiguieron por 750.000 pesos en Internet. No soporto escuchar que otro más se autoproclamó “profeta” o “apóstol”.

Sé que estoy cansado, sin embargo, seguiré adelante, ya no puedo volver atrás, el AMOR DE DIOS es más fuerte.

Es hora de emprender el regreso

Pero he decidido no participar más en el “cristianismo” que fabrica becerros de oro y vacas sagradas. No me pelearé por los primeros lugares en las cenas. Jamás inscribiré mi nombre en un congreso para ir a escuchar a ciertos oradores en DONDE SE COBRE LA ENTRADA.

Renuncio a querer adornar mi nombre con títulos de cualquier especie. No deseo ganar aplausos de auditorios famosos. Buscaré la convivencia de CRISTIANOS Y DE PASTORES QUE NO TENGAN ESPIRITU DE PLATAFORMA.

Me parece difícil de encontrarlos, pero siempre Dios guarda a hombres y mujeres que no se arrodillan ante Baal.

Posiblemente dirás: “¡Qué frustrado y negativo te ves y te oyes!”

Sí, lo estoy, pero no de Jesús y su hermosa Palabra que alumbró mi caminar, sino de las mentiras, fraudes y corrupción de los que se autodenominan “Ungidos de Jehová”.

2 comentarios:

  1. Este lamento refleja el verdadero sentir del pueblo de Dios en estos difíciles tiempos para los verdaderos seguidores de Cristo. Estamos cansados, agobiados, tristes de ver y escuchar tanta herejía, blasfemia y torcedura de la Palabra de Dios por personas que creen ser ovejas del Señor y no lo son...¡y son tantos!.
    Nos unimos en este dolor, comprometiéndonos aun más con la verdad que nos hace libre: "CRisto Jesús". Basta de callar, de llamarlos hermanos, de no cuestionarlos. Llegó la hora de hablar al igual que en los tiempos de nuestros hermanos Profetas y de nuestros hermanos Apóstoles. Ahora nos corresponde y quizás el Señor tenga misericordia de algunos, así como la tuvo con nosotros. Para la Gloria del Señor decimos esto.
    Hnas. de Quillota-Chile.

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  2. Las verdaderas ovejas no pueden sentir otra cosa que náuseas al reconocer lo que se les da como pasto pero que no es pasto, sino que falsedad y mentira. Dios les guarde amados hermanos en Cristo.
    Afectuosamente en Cristo,
    Fernando García Olmedo
    Antofagasta, Chile.

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